PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO (RGE)...

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA LA UNIVERSIDAD DEL ZULIA FACULTAD DE MEDICINA DIVISIÓN DE ESTUDIOS PARA GRADUADOS PROGRAMA DE ESPECIALIZACIÓN EN PEDIATRÍA HOSPITAL GENERAL DEL SUR “DR. PEDRO ITURBE” PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO (RGE) FISIOLÓGICO SEGÚN EL TIPO DE ALIMENTACIÓN, EDAD Y SEXO EN NIÑOS DE 1 A 18 MESES DE EDAD Trabajo Especial de Grado presentado ante la División de Estudios para Graduados de la Facultad de Medicina, La Universidad del Zulia, Maracaibo, Venezuela, para optar al título de Especialista en Pediatría TUTOR: AUTOR: Dra. Yasmina Ríos M.C. Mariela C. Rincón M. C.I.: v-4.993.180 C.I.: v-15.405.008 Especialista en Pediatría Profesor Agregado de LUZ Maracaibo, 24 de Enero de 2.013

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA LA UNIVERSIDAD DEL ZULIA

FACULTAD DE MEDICINA DIVISIÓN DE ESTUDIOS PARA GRADUADOS

PROGRAMA DE ESPECIALIZACIÓN EN PEDIATRÍA HOSPITAL GENERAL DEL SUR “DR. PEDRO ITURBE”

PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO (RGE) FISIOLÓGICO SEGÚN EL TIPO DE ALIMENTACIÓN, EDAD Y SEXO EN NIÑOS DE 1 A

18 MESES DE EDAD

Trabajo Especial de Grado presentado ante la División de Estudios para Graduados de la Facultad de Medicina, La Universidad del Zulia, Maracaibo, Venezuela, para optar al título de Especialista

en Pediatría TUTOR: AUTOR: Dra. Yasmina Ríos M.C. Mariela C. Rincón M. C.I.: v-4.993.180 C.I.: v-15.405.008 Especialista en Pediatría Profesor Agregado de LUZ

Maracaibo, 24 de Enero de 2.013

DEDICATORIA

Al Jesús de la Misericordia y a la Virgen Santísima por iluminar y guiar mis pasos por el buen sendero.

A mis padres por su apoyo incondicional en cada uno de mis sueños. A mis hermanos por estar siempre presentes cuando más los necesito.

A mi esposo, compañero y amigo, por todo su amor y paciencia, por estar a mi lado aún en los momentos más difíciles.

A mi nana, por estar al pendiente de todas mis necesidades. A todos los que forman parte de mi hermosa vida.

AGRADECIMIENTOS

A Dios y a la Virgen, luz del mundo. A mi familia y a mi nana, ejemplo de unión y amor.

A mi esposo, trabajador insaciable. A mi tutor, Dra. Yasmina Ríos, por toda su ayuda, comprensión, paciencia y amistad

incondicional. A LUZ, digna institución de educación superior.

A mis profesores, adjuntos y ejemplos a seguir: Dra. Mercedes Morales, Dra. Yasmina Ríos, Dra. Marlene López, Dr. Víctor García, Dr. Ricardo Mosquera, Dr. Edgar García, Dr. Guillermo

Romero y Dra. Doalys Finol, por todas sus enseñanzas y sabios consejos. A mis compañeras de postgrado: Melissa, Ingrid y Johanna, por toda su alegría, fidelidad y

motivación. A todas aquellas personas que de alguna u otra forma contribuyeron a llevar a cabo este logro

personal y profesional.

ÍNDICE DE CONTENIDO Pág. Resumen…………………………………………………………………………............ 7

Abstract…………………………………………………………………………………. 8

Introducción…………………………………………………………………………….. 9

Pacientes y Métodos…………………………………………………………………….. 13

Resultados………………………………………………………………………………. 14

Discusión………………………………………………………………………………... 16

Conclusiones……………………………………………………………………………. 19

Recomendaciones……………………………………………………………………….. 20

Bibliografía……………………………………………………………………………… 22

Anexos………………………………………………………………………………….. 24

ÍNDICE DE TABLAS Pág. TABLA I.….…………………………………………………………………………….. 26

TABLA II.....……………………………………………………………………………. 27

TABLA III.………….. …………………………………………………………………. 28

TABLA IV………………………………………………………………………………. 29

Rincón Montiel, Mariela Carolina. “PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO (RGE) FISIOLÓGICO SEGÚN EL TIPO DE ALIMENTACIÓN, EDAD Y SEXO EN NIÑOS DE 1 A 18 MESES DE EDAD”. Trabajo Especial de Grado presentado ante la División de Estudios para Graduados, Facultad de Medicina, Universidad del Zulia para optar al Título de Especialista en Pediatría. Maracaibo, República Bolivariana de Venezuela, 29 p.

RESUMEN

El Reflujo Gastroesofágico (RGE) es el paso retrógrado involuntario del contenido gástrico ácido o alcalino del estómago hacia el esófago. El fisiológico, generalmente por inmadurez cardio-hiatal, normal en niños menores de 1 año, sin complicaciones. La Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE), se asocia a vómito, esofagitis, enfermedad respiratoria y alteración en el desarrollo pondo-estatural del niño. Se realizó un estudio descriptivo, correlacional, retrospectivo y transversal, con una muestra de 54 pacientes en edades comprendidas entre 1 y 18 meses de edad, de ambos sexos, que acudieron a la consulta médica pública de Gastroenterología Pediátrica del Hospital Universitario de Maracaibo (HUM), Edo. Zulia, en el período de tiempo comprendido entre Enero de 2.005 a Diciembre de 2.010. Se excluyeron aquellos niños con patología previa de base que condicionen el diagnóstico o ERGE. El objetivo del estudio fue determinar la asociación del RGE fisiológico con el tipo de alimentación, edad y sexo en niños de 1 a 18 meses de edad, que acuden a dicha consulta, para lo cual se utilizó una ficha de recolección de datos. Resultados: el 18.51% de los pacientes con RGE fisiológico recibió lactancia natural, el 12.96% lactancia artificial y el 68.51% lactancia mixta, de ellos 74.07% fueron del sexo masculino y 25.92% del sexo femenino, en cuanto a la edad de 1 a 3 meses fueron el 88.88%, 4 a 6 meses un 3.70%, 7 a 9 meses un 1.85%, 10 a 12 meses un 3.70%, 13 a 15 meses un 0% y de 16 a 18 meses un 1.85%, y de los 10 (18.51%) niños que recibieron lactancia materna 8 presentaron RGE fisiológico desde recién nacidos (RN) y 2 entre las edades de 1 a 3 meses, de los 7 (12.96%) que recibieron lactancia artificial 4 presentaron RGE fisiológico desde RN, 1 entre 1 a 3 meses, 1 entre 4 a 6 meses y 1 entre 16 a 18 meses, y de los 37 (68.51%) que recibieron lactancia mixta 27 presentaron RGE fisiológico desde la etapa neonatal y 10 entre 1 a 3 meses de edad. Conclusión: el RGE fisiológico estuvo mayormente presente en aquellos niños del sexo masculino en edades comprendidas de 1 a 3 meses de edad y que fueron alimentados con lactancia mixta (natural y artificial). El tipo de alimentación no retarda la aparición del RGE fisiológico, aún cuando se presentó en edades más tardías en aquellos niños alimentados con lactancia artificial exclusivamente.

Palabras Claves: Reflujo Gastroesofágico (RGE), Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE), esofagitis, desarrollo pondo-estatural, alimentación. e-mail: [email protected]

Rincón Montiel, Mariela Carolina. "PRESENCE OF GASTROESOPHAGEAL REFLUX (GOR) PHYSIOLOGICAL ACCORDING TO THE TYPE OF FEEDING, AGE AND SEX IN CHILDREN FROM 1 TO 18 MONTHS OF AGE". Special degree work submitted to the Division of Studies for Graduates, Faculty of Medicine, University of Zulia to qualify for the title of specialist in Pediatrics. Maracaibo, Bolivarian Republic of Venezuela, 29 p.

ABSTRACT The Gastroesophageal Reflux (GOR) is the involuntary retrograde step of the acid or alkaline gastric content of the stomach towards the esophagus. The physiological one, generally by cardio-hiatal, normal immaturity in smaller children of 1 year, without complications. The Disease by Gastroesophageal Reflux (GORD), is associated to vomit, esofagitis, respiratory disease and alteration in the development of the boy. A study was made descriptive, corelational, retrospective and cross-sectional, with a sample of 54 patients in ages between 1 and 18 months of age, of both sexes, that went to public the medical consultation of Gastroenterology Pediatrics of the University Hospital of Maracaibo (HUM), Edo. Zulia, in the period of time between January of 2.005 to December of 2.010. Those children with previous pathology excluded themselves from base who condition diagnosis or GORD. The objective of the study was to determine the association of the physiological GOR with the type of feeding, age and sex in children of 1 to 18 months of age, that go to this consultation, for which was used a card of data collection. Results: 18.51% of the patients with physiological GOR received natural lactancy, 12.96% artificial lactancy and 68.51% mixed lactancy, of them 74.07% were of masculine sex and 25.92% of feminine sex, as far as the age of 1 to 3 months went 88.88%, 4 to 6 months a 3.70%, 7 to 9 months a 1.85%, 10 to 12 months a 3.70%, 13 to 15 months a 0% and of 16 to 18 months a 1.85%, and of the 10 (18.51%) young that received maternal lactancy 8 presented/displayed physiological GOR from new born and 2 between the ages of 1 to 3 months, of 7 (12.96%) that received artificial lactancy 4 presented/displayed physiological GOR from new born, 1 between 1 to 3 months, 1 between 4 to 6 months and 1 between 16 to 18 months, and of the 37 (68.51%) that received mixed lactancy 27 presented/displayed physiological GOR from the neonative stage and 10 between 1 to 3 months of age. Conclusion: the physiological GOR was mainly present in those children of masculine sex in included/understood ages of 1 to 3 months of age and that were fed with mixed lactancy (natural and artificial). The type of feeding does not slow down the appearance of the physiological GOR, even though appeared in more delayed ages in those children fed with artificial lactancy exclusively.

Key words: Gastroesophageal Reflux (RGE), Disease by Gastroesophageal Reflux (ERGE), esofagitis, development, feeding. e-mail: [email protected]

INTRODUCCIÓN

El Reflujo Gastroesofágico (RGE) consiste en el paso retrógrado involuntario del contenido

gástrico ácido o alcalino del estómago hacia el esófago. Puede o no acompañarse de síntomas y

ocasionar enfermedad con sus complicaciones. La "Regurgitación" por el contrario, es un síntoma

definido como la llegada súbita y sin esfuerzo de pequeños volúmenes del contenido gástrico

refluido hasta la orofaringe y la boca, secundario al RGE (7,12).

Existen 2 tipos de RGE, el fisiológico o funcional, generalmente por inmadurez fisiológica

cardio-hiatal que impide un cierre absoluto del cardias, facilitando el reflujo del contenido gástrico

hacia el esófago. Se presenta sin repercusiones patológicas y sin necesidad de pruebas

diagnósticas ni terapéuticas, excepto un interrogatorio adecuado, exploración física cuidadosa y

vigilancia clínica mantenida (11). Se considera normal en niños menores de 1 año, con adecuada

ganancia ponderal y síntomas de regurgitación y/o vómitos de contenido alimentario que suceden

tras las tomas, coincidiendo con la expulsión de eructos y acentuándose con los cambios de posición,

sin complicaciones. Estos síntomas mejoran a partir del año de edad (coincidiendo con la

introducción de alimentos sólidos). Un 75% de los casos desaparecen a los 18 meses de edad y casi

el 100% deben haber desaparecido antes de los 4 años (1).

Los mecanismos asociados con RGE son: Relajación Transitoria del Esfínter Esofágico

Inferior (RTEEI), retraso en el vaciamiento gástrico y factores posicionales; la persistencia de

estos mecanismos o factores asociados pueden aumentar el riesgo de Enfermedad por Reflujo

Gastroesofágico (ERGE), siendo la RTEEI el mecanismo más frecuente, causadas por la

distensión abdominal. Esta última se produce por vía refleja mediada por fibras aferentes vagales,

el tracto solitario y neuronas vagales aferentes (4,13). Grandes volúmenes de alimentos y aquéllos

con alta osmolaridad, también incrementan los episodios de reflujo por cambios significativos en

la presión del Esfínter Esofágico Inferior (EEI) (2,5). Por tanto la selección del tipo de

alimentación y cantidad de fórmula a administrar al niño, debe tomarse en cuenta en pacientes

con RGE puesto que ambos influyen en la presentación de reflujo por aumento en la presión

gástrica y retraso en el vaciamiento gástrico antes mencionado (5).

El RGE patológico o ERGE, es aquel reflujo que no ha mejorado considerablemente

manteniéndose más allá del rango de edad considerado como normal o fisiológico (mayores de 1

año). Existe un aumento de la duración o frecuencia de los episodios de reflujo, así como en la

cantidad del contenido refluido (casi toda una toma), y en este caso se asocia a manifestaciones

clínicas tales como vómito, desnutrición, esofagitis, enfermedad respiratoria tipo neumonías,

broncoespasmos, sinusitis, otitis, y alteración en el desarrollo pondo-estatural del niño. Ocurre en

1 de 300 niños. Nelson SP, reporta una incidencia de 2-7% (2,3). Se ha observado mayor

prevalencia en niños con historia de atresia esofágica, disfunción neurológica y hernia hiatal. Ha

sido asociado con bronquitis crónica y bronquiectasia (2). Por otro lado el RGE secundario, es

aquel que se produce cuando existe una causa intra o extra gastrointestinal del reflujo, originada

en el sistema nervioso central, sistema urinario y metabólico. En niños mayores, así como en

adultos, el RGE es percibido clínicamente como pirosis, dolor retroesternal, llenura postprandial,

distensión abdominal, entre otros (1).

Tratando de buscar una explicación a tan llamativo asunto, publicaciones tan antiguas

como la de Carré, en la cual presenta una serie de pacientes afectados por esta condición,

advirtiendo que 5% presentaban estenosis esofágica y 8% tenían evidencias radiológicas de

secuelas pulmonares crónicas. También han aparecido publicaciones más recientes que

mencionan datos preocupantes relacionados con el RGE; para ejemplo se cita textualmente una

de ellas: “Es una causa frecuente de hospitalización en el servicio de lactantes del Hospital

Universitario Ramón González Valencia de Bucaramanga, con una mortalidad de un poco más

del 25%”. Ante esto, los pediatras debemos empezar a mirar con sospechas y recelo el tan

frecuente y aparentemente inofensivo RGE de los lactantes (8).

El manejo del RGE consiste básicamente en racionalizar la alimentación, revisar la

postura en que se realiza, el volumen, tipo (natural a base de leche materna, artificial a base de

leche de vaca o mixta), frecuencia, duración y concentración de la fórmula, y descartar los

vómitos por mala técnica de alimentación. A veces es útil espesar la alimentación, lo que

disminuye la frecuencia de regurgitaciones visibles, y restringir las grasas. Si el niño se alimenta

del pecho, se puede fraccionar la alimentación, y así disminuir el volumen gástrico y el número

de regurgitaciones, por el fenómeno de liberación de presión (9). Las fórmulas lácteas antireflujo,

según las últimas indicaciones, deben reservarse para los niños regurgitadores con pérdida de

peso, pero no para los afectos de ERGE y/o esofagitis, pues en ellos pueden aumentar la duración

y la sintomatología acompañante del reflujo, al enlentecer el aclaramiento esofágico y aumentar

el daño de su mucosa.

En los niños mayores y adolescentes se recomienda limitar la ingesta de chocolate, menta,

picantes, especias y evitar bebidas carbonatadas, colas, café, alcohol y el tabaco. Parece más

razonable explicar a los padres las necesidades nutricionales particulares de sus niños, evitando

transgresiones dietéticas y volúmenes de ingesta inadecuados (11).

Pocos han sido los estudios clínicos que correlacionan la aparición del RGE fisiológico

con el tipo de alimentación del niño. Artículos y publicaciones llevados a cabo en México (2),

Colombia (14) y España (1, 11), dan un enfoque principalmente estructural, anatómico y bioquímico

como causa del mismo, mientras que en Guatemala Barillas y Palacios (10) en su artículo titulado

“Reflujo Gastroesofágico Fisiológico en el primer año de vida”, correlacionan la edad del niño

con la presencia de síntomas de RGE fisiológico según el tipo de alimentación (lactancia materna

y lactancia mixta). En el Instituto Nacional de Pediatría, de Buenos Aires, Argentina, se realizó

una revisión de la literatura médica encontrando que el 50% de los episodios de reflujo se deben

al incremento de la RTEEI (6).

Hoy en día existen múltiples causas de RGE, una de ellas relacionada con el tipo de

alimentación que las madres suministran a sus hijos desde el momento del nacimiento. Esta

última causa fácilmente puede modificarse para obtener mejores resultados en cuanto a la

aparición del RGE fisiológico se refiere. Su presencia, actualmente, es motivo de gran

preocupación y angustia entre las progenitoras, lo que conlleva a la puesta en práctica de cambios

en la alimentación sin orientación médica adecuada, omisión de lactancia materna y cambios de

fórmula, que podrían ser perjudiciales para el niño, y que en cierto modo podría hasta precipitar

la aparición de la ERGE y sus complicaciones, entre ellas el déficit pondo-estatural.

La aparición del RGE se ha ido incrementando en los últimos años, y es uno de los

principales motivos de consulta médica pediátrica junto con otras enfermedades gastrointestinales

y respiratorias, lo cual justifica la presente investigación, ya que al relacionar la aparición del

mismo con el tipo de alimentación, edad y sexo, podríamos informar, orientar y asumir un rol

más activo en el establecimiento de medidas preventivas (prevención primaria ambulatoria en

consulta de crecimiento y desarrollo o niño sano) muy sencillas, fácilmente aplicables por la

madre, así como recomendaciones dietéticas para así evitar su aparición y por tanto sus

complicaciones, no obstante evitaríamos el alto costo que implican estudios diagnósticos e

instauración de tratamiento médico farmacológico específico.

Actualmente pocos temas han sido motivo de tanta controversia como el RGE. Existe una

gran confusión en aspectos conceptuales, causales y de manejo del niño con reflujo. Ante la

escasa disponibilidad de registros estadísticos regionales acerca del tema y con la finalidad de

fomentar el estudio de otras variables relacionadas con el RGE fisiológico en futuras

investigaciones que garanticen al paciente una mejor calidad de vida, se elabora además la

presente investigación, planteándose como objetivo general determinar la asociación que existe

entre el tipo de alimentación, la edad y el sexo con la aparición del RGE fisiológico en la

población infantil.

PACIENTES Y MÉTODOS

Se realizó un estudio de tipo descriptivo, correlacional, retrospectivo y transversal. El

diseño de la investigación fue observacional. La población estudiada estuvo representada por

todos los niños en edades comprendidas entre 1 y 18 meses de edad, de ambos sexos (masculino

y femenino), que acudieron a la consulta médica pública de Gastroenterología Pediátrica del

Hospital Universitario de Maracaibo (HUM), Edo. Zulia, en el período de tiempo comprendido

entre Enero de 2.005 a Diciembre de 2.010 (5 años).

Se tomó una muestra no probabilística, seleccionando aquellos pacientes que de esa

población presentaron diagnóstico clínico de RGE fisiológico, en los cuales se investigó el tipo

de alimentación (natural, artificial, mixta u otros) recibida previo al diagnóstico y según síntomas

iniciales, edad y sexo. Se excluyeron aquellos niños menores de 1 mes y mayores de 18 meses de

edad, y aquellos con patología previa de base que condicionen el diagnóstico.

La recolección de datos se llevó a cabo directamente en la consulta médica pública de

Gastroenterología Pediátrica del Hospital Universitario de Maracaibo (HUM), Edo. Zulia,

mediante la revisión sistemática y organizada de historias médicas realizadas por el especialista

en el período de tiempo comprendido entre Enero de 2.005 a Diciembre de 2.010,

correspondientes a aquellos niños que cumplían con los criterios de inclusión, procurando una

buena representatividad.

El instrumento utilizado fue una ficha de recolección de datos elaborado por el propio

autor (Anexo 1), el cual consta de datos personales del paciente (nombre, N° de historia, edad,

sexo, dirección, procedencia, lugar y fecha de nacimiento), datos antropométricos (peso y talla),

síntomas iniciales y tipo de alimentación (natural, artificial, mixta u otros) previo al diagnóstico

de RGE fisiológico, así como la edad a la cual se realizó tal diagnóstico y fecha de inicio de los

síntomas, para su posterior interpretación y análisis. A Los datos obtenidos se les aplicó análisis

estadístico de tipo descriptivo y se analizaron por medio del cálculo de la distribución numérica y

porcentual. Asimismo, se calculó el promedio y la desviación estándar. Los resultados se

presentaron mediante tablas.

RESULTADOS

En éste se presentan los resultados obtenidos de la aplicación del instrumento de

recolección de datos.

En la tabla I que corresponde a la presencia de RGE fisiológico según la edad de

diagnóstico del niño, se observa que del total de la muestra estudiada de 54 pacientes que

corresponden al 100%, un 88.88% (48) corresponde a niños en edades comprendidas entre 1 a 3

meses de edad, 3.70% (2) de 4 a 6 meses, 1.85% (1) de 7 a 9 meses, 3.70% (2) de 10 a 12 meses,

0% (0) de 13 a 15 meses y finalmente un 1.85% (1) de 16 a 18 meses de edad.

En la tabla II al determinar la presencia de RGE fisiológico según el sexo, se observa que

del total de la muestra estudiada de 54 niños que corresponden al 100%, un 25.92% (14)

corresponde al sexo femenino y un 74.07% (40) corresponde al sexo masculino.

En la tabla III se muestra la presencia de RGE fisiológico según el tipo de alimentación

administrada al niño previo al diagnóstico, se observa que del total de la muestra estudiada de 54

niños que corresponden al 100%, un 18.51% (10) recibieron lactancia materna exclusiva y a libre

demanda, un 12.96% (7) recibió lactancia artificial a través de la administración de fórmulas

infantiles industrializadas, muchas de ellas especiales (soya, sin lactosa, hipoalergénica e incluso

antireflujo), y un 68.51% (37) recibió lactancia mixta, es decir, tanto lactancia natural como

lactancia artificial.

En la tabla IV se relaciona la edad de aparición de RGE fisiológico según el tipo de

alimentación que recibía el niño previo al diagnóstico, se observa que del total de la muestra

estudiada de 54 niños que corresponden al 100%, de los 10 (18.51%) niños que recibieron

lactancia materna 8 presentaron RGE fisiológico desde la etapa neonatal o recién nacidos (RN) y

2 entre las edades de 1 a 3 meses, de los 7 (12.96%) que recibieron lactancia artificial 4

presentaron RGE fisiológico desde RN, 1 entre 1 a 3 meses, 1 entre 4 a 6 meses y 1 entre 16 a 18

meses, y de los 37 (68.51%) que recibieron lactancia mixta 27 presentaron RGE fisiológico

desde la etapa neonatal y 10 entre 1 a 3 meses de edad.

DISCUSIÓN

En la presente investigación se revisaron sistemáticamente 54 historias clínicas de

pacientes en edades comprendidas entre 1 y 18 meses de edad, de ambos sexos, que acudieron a

la consulta médica pública de Gastroenterología Pediátrica del Hospital Universitario de

Maracaibo (HUM), Edo. Zulia, en el período de tiempo comprendido entre Enero de 2.005 a

Diciembre de 2.010, por presentar clínica de RGE fisiológico; comparando los resultados

obtenidos según variables, y así obtener conclusiones y emitir recomendaciones, a continuación.

En la tabla I, se observa que de los rangos de edades estudiadas de 1 a 18 meses de edad,

el rango de 1 a 3 meses fue el más diagnosticado por presentar RGE fisiológico constituyendo un

88.88% (48 casos) de un total de 54 pacientes, disminuyendo a medida que avanza la edad del

niño hacia los 18 meses de edad, lo cual se corresponde con los resultados de Barillas y Cols. en

Guatemala; ellos reportaron que a la edad de 3 meses se presentaron más síntomas de RGE

(16%), es decir 120 casos de un total de 765 pacientes estudiados, y luego observaron la

disminución de los mismos conforme avanza la edad del niño hacia los 12 meses, ya que los

rangos de edades estudiados fueron de 1 a 12 meses de edad (10). Osatakul y Cols. en Tailandia,

estudiaron 145 infantes en un estudio de cohorte de 1 año, la prevalencia de RGE fisiológico

estuvo representada por lactantes entre 1 y 2 meses de edad (86.9%), con un descenso

significativo hacia los 8 meses (22.8%) (15), es decir, que tanto la aparición como desaparición del

RGE fisiológico ocurrió a edades más tempranas que en el presente estudio. Similares resultados

obtuvo Miyazawa y Cols. en Japón, donde de 921 infantes estudiados, el 47.1% presentó RGE

fisiológico al mes de edad disminuyendo a los 7 meses con un 6.4% (16). Por otro lado Sarmiento

y Cols. en Cuba, demostraron que de 50 lactantes estudiados evolutivamente durante 2 años, el

44% (22 pacientes) presentaron manifestaciones de RGE fisiológico antes de los 3 meses de

edad, 84% (42 pacientes) en los primeros 6 meses (17).

Todo esto confirma el carácter fisiológico del RGE hacia el primer año de vida y su

desaparición a medida que el niño alcanza los 6 meses, debido a que en esta edad con frecuencia

ya se ha iniciado la ablactación y por consiguiente la introducción de alimentos sólidos, así como

también a optar la posición sentada, contribuyendo ambos a una forma natural de tratamiento de

esta condición.

En la tabla II, observamos que el sexo más frecuente fue el masculino, con un 74.07% (40

casos), con una amplia diferencia con respecto al sexo femenino que corresponde a un 25.92%

(14 casos), este resultado difiere de los obtenidos por Barillas y Cols. en Guatemala, donde el

sexo predominante fue el femenino con un 53% (405 casos) y el masculino con un 47% (360

casos) (10), sin embargo la diferencia no fue tan notable entre ambos como en nuestro estudio. Así

mismo se aprecia que la muestra utilizada para la presente investigación fue de 54 pacientes, en

comparación con los 765 pacientes de Barillas y Cols., a lo que pueda deberse tal diferencia. Por

otro lado Sarmiento y Cols. en Cuba, donde se estudió una muestra similar a la nuestra (50

pacientes), no existieron diferencias importantes en cuanto al sexo, diagnosticándose 26 varones

y 24 hembras (52% y 48% respectivamente) (17), predominando sin embargo, el sexo masculino

sobre el femenino como en nuestro estudio.

En la tabla III, con respecto al tipo de alimentación que recibió el paciente previamente y

la aparición de RGE fisiológico se observa que la lactancia mixta (materna y artificial) fue la

forma de alimentación más frecuente en estos niños con un 68.51% (37 casos) pudiendo

reconocer con este resultado que la lactancia materna exclusiva y a libre demanda sigue siendo la

alimentación adecuada del niño durante sus 6 primeros meses de vida, sin necesidad de introducir

conjuntamente fórmulas lácteas industrializadas de las cuales muchas utilizadas en estos

pacientes fueron especiales (soya, sin lactosa, hipoalergénica e inclusive antireflujo), pudiendo

quizás con esto disminuir los episodios de reflujo y evitar la sobrealimentación que conlleva la

lactancia mixta con la consecuente distensión abdominal, RTEEI y finalmente RGE; estos

resultados coinciden con los obtenidos por Barillas y Cols. en Guatemala, donde la lactancia

mixta fue la forma de alimentación más frecuente en sus pacientes con un 60.78% (465 casos),

sin embargo en su trabajo no se consideró la lactancia artificial como otra forma de alimentación

o variable a estudiar, sino solamente la fórmula antireflujo, donde no se encontraron diferencias

en la evolución clínica con otros tipos de alimentación (10). Contrariamente Osatakul y Cols. en

Tailandia y Miyazawa y Cols. en Japón (15, 16), no encontraron diferencias significativas en cuanto

a la prevalencia de RGE fisiológico en aquellos niños alimentados bien sea con leche materna

exclusiva, lactancia artificial o alimentación mixta.

En la tabla IV, donde se relaciona la edad de aparición del RGE fisiológico según el tipo

de alimentación, se observa que el RGE apareció a edades muy tempranas del niño,

específicamente durante la etapa neonatal o recién nacido (RN) con 39 casos (72.22%),

independientemente del tipo de alimentación que recibió; sin embargo la mayoría de estos niños

RN (27 casos) recibieron lactancia mixta en comparación con los otros tipos de lactancia, quizás

debido al fenómeno de sobrealimentación antes mencionado. Así mismo cabe destacar que muy

pocos fueron los casos de aparición de RGE fisiológico en edades tardías salvo aquellos niños

que se alimentaron con lactancia artificial exclusivamente (4 a 6 y 16 a 18 meses), lo cual es

contradictorio si evaluamos el hecho de que la lactancia natural es la alimentación ideal para el

niño en los primeros 6 meses de vida, esperando con ello que la aparición del RGE sea entonces

más tardía con este tipo de alimentación. Esto quizás también pueda deberse al hecho de que la

madre brinda lactancia materna a libre demanda sin la posibilidad de medir la cantidad de leche

que necesita el niño, contrariamente a lo que sucede con la lactancia artificial donde se puede

medir directamente la cantidad de leche a suministrar al niño según sus necesidades acorde a su

edad y capacidad gástrica, evitando así la sobredistensión y por tanto el reflujo. Esta relación no

pudo ser comparable con otros estudios antes mencionados.

CONCLUSIONES

En base a los resultados obtenidos de la presente investigación se puede concluir:

• El grupo etario más afectado y con diagnóstico de RGE fisiológico corresponde a los

niños en edades comprendidas entre 1 a 3 meses de edad.

• El sexo en el cual predominó la presencia de RGE fisiológico fue el masculino, con una

gran diferencia con respecto al femenino.

• Aquellos niños que recibieron lactancia mixta presentan RGE fisiológico en mayor

proporción que aquellos que recibieron natural o artificial exclusivamente.

• El tipo de alimentación previamente recibida (natural, artificial o mixta) no retarda la

aparición de RGE fisiológico, ya que en todas ellas se manifestó en etapa neonatal con

mayor proporción en aquellos que recibieron lactancia mixta.

RECOMENDACIONES

• Establecer programas educativos dirigidos a todas las comunidades, colegios,

universidades y hospitales, sobre la importancia que tiene la administración de la lactancia

materna exclusiva y a libre demanda hasta los 6 meses de edad, con énfasis en la

prevención de enfermedades y los beneficios que ésta brinda a la salud, alimentación y

buen desarrollo biopsicosocial del niño.

• Crear centros de distribución de material informativo visual (trípticos, folletos, volantes,

etc.), así como videos informativos, tipo documentales, donde se aborde en forma muy

didáctica y adecuada al nivel de educación de la población diversos tópicos relacionados

con el tema en estudio, así como el tipo de alimentación del niño en crecimiento acorde a

su edad.

• Es deber del Pediatra Puericultor asumir la responsabilidad en la educación alimentaria

del niño una vez que éste llegue a la consulta de crecimiento y desarrollo, como parte

importante de su salud junto con otras áreas como la higiene personal y las

inmunizaciones.

• Determinar un protocolo de acción que permita el manejo oportuno del paciente con

historia y sintomatología de RGE fisiológico, tanto a nivel primario en el área ambulatoria

como a nivel institucional en los diferentes hospitales públicos y privados de la localidad,

con ello evitaríamos quizás que el paciente evolucione a Enfermedad por Reflujo

Gastroesofágico o ERGE.

• Orientar a los padres sobre lo que significa RGE fisiológico, la automedicación y el

cambio constante de fórmulas lácteas industrializadas que pudieran perjudicar y agravar

un problema que suele desaparecer por sí sólo, o evolucionar a enfermedad y sus

complicaciones si no se toman las medidas adecuadas, pudiendo acudir a especialistas en

la materia como el Pediatra o de lo contrario al Gastroenterólogo Pediatra para recibir

orientación y prevención a su debido tiempo.

• El médico debe informar a los padres de manera comprensible de la naturaleza benigna y

transitoria de la mayoría de los RGE no complicados, debiendo ser receptivos ante las

dudas e interrogantes de los mismos, y haciendo comentarios sobre la incidencia-

prevalencia, datos a valorar en la mejoría clínica y evolutividad del niño, y sobre el interés

en el seguimiento de las órdenes terapéuticas.

• Establecer un contacto más íntimo con profesionales especialistas, en el área de Pediatría,

Nutrición y Dietética, Gastroenterología, Radiología, Ginecología y Obstetricia

principalmente, en un rol más activo para encaminar la resolución de todos aquellos casos

de RGE fisiológico de manera satisfactoria.

• Realizar trabajos de campo con cierta regularidad que permitan evaluar el alcance de las

estrategias empleadas e incentivar al estudio del RGE fisiológico en el área de pediatría.

Así mismo que sea esta investigación punto de partida para el estudio de otras variables

diferentes relacionadas con el RGE, así como de la ERGE misma.

BIBLIOGRAFÍA (1) J. Guerrero-Fdez. Reflujo Gastroesofágico. Hospital Infantil La Paz, Madrid. Agosto, 2.002. Actualizado en Noviembre 2.002. (2) José A. Hernández M., Andrea T. Ortega R., María A. Márquez V. Artículo de revisión. Reflujo Gastroesofágico en Pediatría, ¿Cuándo amerita tratamiento?: controversia de las últimas décadas. Octubre-Diciembre 2.008. Vol. 15, núm. 4, Pág. 288. (3) Gilger M., El Serag H., Gold B. Prevalence of Endoscopic Findings of Erosive Esophagitis in Children: a population-based study. J. Pediatrics Gastroenterology Nutrition, 2.008; 47: 141-6. (4) Jung A. Gastroesophageal Reflux in Infants and Children. Am Fam Physician 2.001: 1.853-60. (5) Salvatore S., Vandenplas Y. Gastroesophageal Reflux and Cow Milk Allergy: is there a link?. Pediatrics, 2.002; 110; 972-84. (6) Reflujo Gastroesofágico en la Infancia. www.cirpedal.com.ar/reflujo.htm. (7) Reflujo Gastroesofágico. www.utmb.edu/otoref/grnds/pdigerd-001/pedigerd/001025.htm. (8) Luis F. Gómez U. Revista de Pediatría. Reflujo Gastroesofágico en niños: ¿”Enfermedad" de Moda?. Universidad de Antioquia. (9) Francisco Larraín. Artículo: Vómitos Crónicos y Reflujo Gastroesofágico. Hospital Clínico Facultad de Medicina, P. Universidad Católica de Chile. Publicado Mar Nov. 11, 2.008. (10) Claudia Barillas, Jorge P. Rosales. Artículo: Reflujo Gastroesofágico Fisiológico en el primer año de vida. Departamento de Pediatría. Hospital General de Enfermedades. Instituto Guatemalteco de Seguridad Social. 2.001-2.003. (11) H. Armas Ramos. Reflujo Gastroesofágico en Niños. Unidad de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica. Hospital Universitario de Canarias. Facultad de Medicina. Universidad de La Laguna (Tenerife). Actitud diagnóstico-terapéutica bscp Can Ped 2.004; 28 - nº 2 y 3. (12) A.J. Carbajo Ferreira. Vómitos y Regurgitaciones. Reflujo Gastroesofágico. Centro de Salud “Reyes Magos”. Alcalá de Henares. Madrid. Pediatría Integral 2.003; VII (1):15-23. (13) Van Wijk M., Benigna M., Dent J. Effect of body position changes on postprandial gastroesophageal reflux and gastric emptying en the healthy premature neonate. J Pediatrics 2.007; 151: 585-90. (14) Albis Hani de Ardila. Pruebas diagnósticas en Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE). Unidad de Gastroenterología. Hospital de San Ignacio. Pontificia. Universidad Javeriana. Fecha recibido: 20-05-09/ Fecha aceptado: 29-05-09.

(15) Osatakul S, Sriplung H, Puetpaiboon A, Junjana CO, Chamnongpakdi S. Prevalence and natural course of gastroesophageal reflux symptoms: a 1-year cohort study in Thai infants. Department of Pediatrics, Faculty of Medicine, Prince of Songkla University, Songkla, Thailand. [email protected]. J Pediatr Gastroenterol Nutr. 2.002 Jan;34(1):63-7.

(16) Miyazawa R, Tomomasa T, Kaneko H, Tachibana A, Ogawa T, Morikawa A. Prevalence of gastro-esophageal reflux-related symptoms in Japanese infants. Department of Pediatrics, Gunma University School of Medicine, Maebashi, Japan. Pediatr Int. 2.002 Oct;44(5):513-6.

(17) Wilber Ernesto Díaz Sarmiento, Armando Expósito Sablón, Pedro Luis Pérez Martin. Reflujo gastroesofágico: comportamiento evolutivo de 50 lactantes. Departamento de Pediatría. Hospital Pediátrico Provincial. Holguín, Cuba. Correo Científico Médico de Holguín 1997; 1(3).

ANEXOS

ANEXO 1

INSTRUMENTO DE RECOLECCIÓN DE DATOS

PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO (RGE) FISIOLÓGICO SEGÚN EL TIPO DE ALIMENTACIÓN, EDAD Y SEXO EN NIÑOS DE 1 A 18

MESES DE EDAD

Fecha: / / . Caso N°: ___________.

Historia N°: ________________.

Nombre y Apellido: _______________________________________________________.

Edad: __________. Sexo: Femenino ( ) Masculino ( )

Lugar y Fecha de Nacimiento: ______________________________________________. Dirección de Habitación: ___________________________________________________ _________________________________________________________________________. Procedencia: ____________________________. Datos Antropométricos: Peso: ________Kg. Talla: ________cms. Síntomas iniciales de RGE fisiológico: ___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________. Edad de diagnóstico de RGE fisiológico: ________________. Fecha de inicio de los síntomas: ______________. Tipo de alimentación antes del diagnóstico: Natural ( ) Artificial ( ) Mixta ( ) Otros: _____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________. Investigador responsable: Dra. Mariela C. Rincón M.

TABLA I

PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO FISIOLÓGICO

SEGÚN LA EDAD DE DIAGNÓSTICO

EDAD (MESES) N° % 1 - 3 48 88.88 4 - 6 2 3.70 7 - 9 1 1.85 10 - 12 2 3.70 13 - 15 0 0 16 - 18 1 1.85 ______________________________________________________________________________ TOTAL 54 100.00

TABLA II

PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO FISIOLÓGICO SEGÚN EL SEXO

SEXO N° % FEMENINO 14 25.92 MASCULINO 40 74.07 ______________________________________________________________________________ TOTAL 54 100.00

TABLA III

PRESENCIA DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO FISIOLÓGICO SEGÚN EL TIPO DE ALIMENTACIÓN PREVIA

ALIMENTACIÓN N° % NATURAL 10 18.51 ARTIFICIAL 7 12.96 MIXTA 37 68.51 ______________________________________________________________________________ TOTAL 54 100.00

TABLA IV

EDAD DE APARICIÓN DE REFLUJO GASTROESOFÁGICO FISIOLÓGICO SEGÚN EL TIPO DE ALIMENTACIÓN

EDAD LACTANCIA LACTANCIA LACTANCIA NATURAL ARTIFICIAL MIXTA RN 8 4 27 1 - 3 2 1 10 4 - 6 1 7 - 9 10 - 12 13 - 15 16 - 18 1 ______________________________________________________________________________ TOTAL 10 7 37